El sector del asfalto relanza el debate sobre las relaciones contractuales entre las administraciones de carreteras y el mercado
La versión digital el número 23 de la Revista Asfalto y Pavimentación ya está disponible online. Su descarga gratuita es posible desde la página ASFALTO Y PAVIMENTACIÓN.
El “valor que aporta a los ciudadanos la construcción y, muy especialmente, la conservación y la rehabilitación de la red de carreteras” abre la vigésimo tercera edición de la revista especializada Asfalto y Pavimentación. “Cuando desde algunos sectores económicos se solicita una mayor inversión en infraestructuras, la opinión pública es muy escéptica sobre la rentabilidad global de dichas inversiones“, explica el editorial para luego ahondar en las relaciones contractuales entre las administraciones de carreteras y el mercado.
En este último sentido, el sector del asfalto defiende la contratación pública basada en la creación de valor, frente al concepto simplista de “relación calidad-precio” o “rentabilidad”. Afirma que “la inclusión y valoración de criterios relacionados con la innovación y la sostenibilidad (“compra pública verde”) pueden ser un revulsivo que permita a las empresas que invierten en estos dos aspectos ver recompensados sus esfuerzos y, simultáneamente, las administraciones recibir productos y servicios con el mayor valor añadido posible”.
La posición de ASEFMA al respecto es firme. Son muchos los foros y comunicaciones en los que ha mostrado su desacuerdo con “la política de adjudicación basada en la licitación por subasta, donde prevalece el criterio económico y el producto normalizado“, frente a “la licitación por concurso que estimule la innovación y la experiencia“.
Siguiendo esta línea discursiva, en Tribuna del número 20 de la mencionada revista de Asfalto y Pavimentación, Juan Antonio Soto refiere directamente a la peligrosidad de las bajas temerarias en los contratos del sector público. “¿Por qué se adjudican obras a empresas que se comprometen a realizarlas con un 50% de rebaja sobre el presupuesto calculado por los ingenieros de la administración?”, se pregunta.”¿Es posible hacer bien una obra con esa bajada en la subasta?”. La conclusión del vocal de la revista es clara: “Lo barato siempre sale caro” y en materia de construcción y conservación de carreteras: “la administración debe controlar más los trabajos realizados por según qué empresas para evitar desaguisados a corto plazo”.